El caso de éxito del que os vamos a comentar se produjo en un juzgado de instrucción de la comunidad de Madrid. El cliente nos contrato ya avanzada la instrucción por un presunto delito de distribución de pornografía infantil.
UNA GRAVÍSIMA ACUSACIÓN QUE SE ASENTABA EN UN ATESTADO DE LA POLICÍA NACIONAL QUE ACREDITABA QUE DURANTE MESES, DESDE LA WI-FI DE NUESTRO CLIENTE SE HABÍA PRODUCIDO UN DELITO DE DISTRIBUCIÓN DE PORNOGRAFÍA INFANTIL DE MILES DE IMÁGENES Y DE VÍDEOS.
En nuestro despacho de abogados penalistas somos expertos en la defensa de acusaciones por delito de tenencia y distribución de pornografía infantil. Dominamos esta materia y sabemos cómo tenemos que actuar para obtener el mejor resultado para con nuestros clientes.
Nuestros abogados expertos en derecho penal, lo primero que hizo fue personarse en las actuaciones y acceder a las mismas de forma íntegra. Nos llamó enormemente la atención de la policía nacional, ciertamente acreditaba que desde la IP y del Wi-Fi de nuestro cliente se había cometido, presuntamente, el delito de pornografía infantil del que se acusaba a nuestro cliente.
En segundo lugar, pudimos apreciar como nuestro cliente se acogió a su derecho a no prestar declaración en la comisaría, mientras que en el juzgado de instrucción, en sede de su primera declaración, si prestó declaración negando los hechos.
Tuvo la enorme fortuna de que el ministerio fiscal no solicitara la vista de prisión provisional y su ingreso inmediato en prisión. Éste último aspecto, no es baladí, pues no son pocas las ocasiones en donde el ministerio fiscal solicita la prisión provisional para acusados por delito de pornografía infantil.

Tras el estudio del expediente completo y después de una reunión con nuestro cliente en donde nos manifestaba una y otra vez se absolutamente ajeno a los hechos por los que se le acusaba, pusimos en marcha la maquinaria.
Decidimos junto con el cliente practicar una prueba pericial que acreditara las circunstancias en la que se encontraba tanto el Wi-Fi como la IP de su vivienda Y de esta manera obtuvimos el primero de los elementos que resultó capital para conseguir el archivo de las actuaciones en contra de nuestro cliente.El ingeniero informático, y su empresa, elaboraron un informe en donde acreditamos que nuestro cliente no habéis había sido el auto del presunto delito de distribución de pornografía infantil.
En señalado informe fue aportado a las actuaciones a la mayor brevedad posible pero para corroborarlo procedimos a solicitar como medio de prueba por parte del juez de instrucción se diera orden de efectuar un informe de similares características. Fué fundamental que presentáramos el que nosotros de manera privada habíamos realizado para que el Juez de Instrucción accediera a realizar otro.
El resultado del informe pericial ordenado por el juez de instrucción llegó a las mismas conclusiones que el que nosotros habíamos practicado de forma privada. Tan pronto recibimos el mismo interesamos el sobreseimiento y archivo de las actuaciones en contra de nuestro cliente por un presunto delito de distribución de pornografía infantil ya que conseguimos acreditar que niel ni ningún familiar que habitaba en la vivienda había sido el autor de la distribución de pornografía infantil y que, al tener una Wi-Fi accesible cualquiera de manera remota se había conectado a la misma y había cometido el ilícito penal.
Aunque parezca sorprendente, no son pocos los asuntos de esta materia penal que defendemos todos los trimestres. El desconocimiento del peligro que tienen las redes Wi-Fi, e Internet en general provocan a personas que nada tienen que ver con estos ilícitos penales el pasar como investigado por un procedimiento judicial de carácter penal, de los más graves que se establecen en nuestro código penal.
Gracias al gran equipo que formamos con nuestro cliente obtuvimos Justicia.